VIVA RIEGO

Mi enhorabuena a Javier Marías, a Almudena Grandes y a Antonio Villanueva Edo. A los dos primeros, por sus respectivos artículos de El País Semanal de ayer 24 de abril. Al último, por su excelente libro “Los héroes olvidados”. Todos están relacionados sin saberlo.

Almudena Grandes escribe, a propósito del día de San Jordi, sobre los libros y el mundo de libertad que descubren a quienes leen. Busquen y lean, relean o trilean Farenheit 451, antes de que una nueva Inquisición queme ese libro haciéndolo desaparecer en el olvido de los descatalogados, o peor, de los no digitalizados.

            Javier Marías se espanta de que nadie quiera ser Liberal en el mundo, de que las ideas ajenas, las esferas privadas, no se respeten y no se distinga entre la acción o desarrollo de las competencias, trabajos o capacidades y los vicios íntimos o debilidades humanas. Todo se está radicalizando, no hay grises. Enmarca y sintetiza perfectamente el espíritu del Liberalismo decimonónico. Sólo le falta un “Viva la Pepa”.

            Antonio Villanueva Edo nos deleita con un viaje a nuestro pasado colonial más oculto y escondido. Nos descubre el espíritu libre y humanístico de unos paisanos ilustrados que se enfrentan a la adversidad de un despotismo oscurantista, que lejos de premiar los logros de sus más fieles vasallos, se empecinaba en olvidarlos y ningunearlos. Aventura colosal desconocida por nuestra juventud la de la universalización de la vacuna de la viruela por el Imperio Español y el Mar de La China. Desconocimiento que, junto con los últimos descubrimientos sobre los viajes de los marinos chinos previos a Colón, espero se corrija prontamente en los libros de texto que estudian nuestros hijos. Léanlo, descubrirán nuevos héroes.

            Todos ellos coinciden en ensalzar la libertad de elección, la libertad de acción, el derecho a una esfera pública y privada, el deber de justicia moral e intelectual sin el que una sociedad jamás será libre, el derecho a discernir y a equivocarse. Todos ellos critican el fanatismo y el extremismo intelectual, social y político, la estrechez de miras de un Estado ególatra, de una sociedad corrompida, de un individuo sin dudas, sin incertidumbres.

            “Viva Riego”. Viva la libertad.

CIUDADANO K.O.